lunes, 23 de mayo de 2011

LOS POCA PLAYA - por el Libi.

Grupo de personas que entran en la playa como los bancos de boquerones, desesperaos y en manadas. ¿Cómo detectarlos?. Te cuento, Suelen ser de secano, dicese de poblaciones que no han visto el agua ni en un video de Custoe. La crema Nivea se la colocan a la junta de los grifos, a los filos de la vitro, no saben pa lo que és. Todo lo llevan envuelto en papel albal, hasta la pala y el cubo de los niños. Se suelen sentar en la playa en corro, como una comparsa caducá en el falla. Han visto tan pocas veces una playa, que si ven al socorrista izar la bandera roja esperan a que la cambie a verde pa cruzar, como si hubiera un paso de cebra en la orilla. Si la abuela mete la mano en el agua salada llama corriendo a su yerno y con una voz bajita dice.- "Juanito, mete la mano abajo que hay más por tu madre".
No llevan sombrilla, se cubren del sol con cualquier cosa, predominando los catálogos de briole, que supongo lo han cogido del buzón del pisito de alquiler. También se suelen colocar sin verguenza alguna, una hoja de diario en forma de barquito chungo. La indumentaria mas común en ellos para ir a la playa es.- bañador color amarillo chillón tirando pa ronco y camisa de rayas Ike con un nudito a la altura del ombligo central. Calcetines color boquilla de fortuna y zapatos castellanos a juego con la nevera de la Pepsi Cola.
los bikinis a las féminas le forman culeras. Las tetas, una mas alta que la otra como una fachá rehabilitá. Todo le cae tan malamente que si la comunidad europea ese día pasase revista a la Victoria, sin pensárselo nos quitan la bandera azul y cuelgan en el mastil un diploma de cartón.
Si traen al abuelo, a éste lo dejan arriconao, el pobre hombre a verse desplazado comienza a ejercer el papel de sátiro. O sea, gafas de sol de cuando Rayban se examinó de oftalmología. Al ratito el viejo coge el Marca y hace como el que lo lee, pero no cambia de página. Se lleva to la tarde con la portada que dice.- "Alonso engripó en San Marino". Porque dicho viejo lo que lee son las cachas de la que vende los refrescos.
Gracias a Dios, no todos los turistas que nos visitan son de este corte, pero ayer en la victoria di con un grupo que me salvó el escribir este comentario jocoso.

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